domingo, 12 de junio de 2011

Hear my song.




Peter Chelsom, antes de diluirse casi por completo en la voraz máquina de Hollywood, dirigió algunas peliculas fabulosas que transitaban amablemente por una especie de costumbrismo mágico con bastantes toques biográficos. En 1991 presentó Hear my song ( aquí estrenada como Algún día te encontraré), entrañable fabulación sobre el tenor Josef Locke, quién tras cosechar gran éxito en tierras inglesas tuvo que retornar y desparecer en su Irlanda natal a causa de problemas con el fisco. Años después regresaría a Inglaterra y es con esa premisa, que Chelsom construye una historia en la que un promotor teatral emprende un viaje homérico hacia las colinas verdes para encontrar al hombre y convencerle para que de un último recital. En youtube se encuentran varios videos de los momentos musicales, especialmente emocionante el reencuentro del público con Locke en Torna a Surriento. El gran Ned Beatty interpreta al cantante.

Mouth to mouth.


Una vez dominado por completo un estilo que bebía por igual del rock y del punk, atravesado de música celta y de luminosas melodías pop, Levellers decidieron magnificar y "alternativizar" su sonido en un album sin desperdicio, que si bien les alejaba de los arreglos combativos más evidentes en sus trabajos anteriores - ese violin en primer plano - arrancaba un puñado de buenísimas canciones que, sin hacerles perder sus señas de identidad más reconocibles, les hacían parecer casi otra banda. Si bien en las letras, continuaban sin más con las relaciones personales, la agitación social y la imaginación como medio tranformador y evasivo frente a la confusión y apatía, instrumentalmente se mostraban menos enmarañados, más definidos y hasta con suntuosos arreglos orquestales en algunos temas.


Corría el año 1997 y este disco les brindó la oportunidad de chapotear en las listas de éxitos y obtener un extraño reconocimiento como parte de la pléyade de grupos que nutrían las filas del entonces laureado brit pop. Canciones como Far Away, Celebrate o Dog Train competian comodamente y junto a otras, descubrían una pequeña senda experimental, a su manera, que consolidarían y agotarían en su posterior disco, el notable Hello Pig. Además, en Mouth To Mouth está Beautiful Day, canónica canción que desprende desde el primer segundo y en cuatro minutos toda la melancolía y la gracia que andabas buscando.

El pájaro tiene un plan.




Cosas que hacer cuando no haces la siesta.

La Piel.



Esta banda de San Sebastian debutó y puso fin a su trayectoria con un disco homónimo rotundo. De los pocos que todavía conservo en cesette. Diez canciones vigorosas, cada una de ellas representando un camino diferente y todas, enmarcadas en un pop rock de línea clara maleado en aires de bolero, de rumba o hasta brisas mexicanas con unas letras precisas y tremendamente bien acabadas. Desconozco cuanto estuvieron funcionando esta gente antes de grabar pero "La Piel" desprende una claridad de ideas y una autoridad que todavía estan buscando multitud de bandas, que surgireron después, y que todavía funcionan alineadas en esa especie de suerte de pop ibérico de fm.